El teletrabajo ha marcado un antes y un después este año. ¿Ha venido para quedarse? ¿O es algo pasajero?
Los espacios de coworking han estado pisando fuerte éstos últimos años en las grandes ciudades, pero tras la pandemia, son muchas las ciudades y pueblos que se están adaptando a este modelo de oficina.
¿Coworking? ¿Aún no sabes de qué trata?
Los espacios de coworking son oficinas compartidas entre diferentes profesionales. Rompiendo con el modelo de oficina tradicional privada. Normalmente se trata de mesas corridas en las que profesionales autónomos, teletrabajadores y empresarios, etc… comparten un mismo espacio de trabajo.
Los clientes de estos espacios suelen ser en su mayoría, profesionales que no necesitan más que un portátil, una taquilla, su teléfono móvil y una buena conexión a internet para poder realizar su trabajo: diseñadores, marketing digital, periodistas, investigadores, arquitectos, asesores, ingenieros, informáticos… y por supuesto… TELETRABAJO.
Trabajar en un espacio de coworking se asimila a trabajar en una empresa con diferentes departamentos, donde cada persona o grupo se dedica a una tarea diferente pero comparten un mismo espacio. De esta manera, estarás rodeado de profesionales de todo tipo, con diferentes intereses, puntos de vista, aptitudes y cualidades. Son como compañeros de trabajo, pero en lugar de dedicar su tiempo en otro campo de tu misma empresa, trabajan para ellos mismos o para otras empresas.
A pesar de esto, eres tú quien decide enriquecerse o no de estos contactos y posibles sinergias con otros profesionales. En un espacio de coworking no estás obligado a relacionarte, cada persona tiene una rutina diferente, pero sabiendo siempre que no estamos solos. Compartimos lo que queremos y con quienes queremos.
¿El coworking es para ti?
El concepto nació en San Francisco en 2005 debido a los cambios en la economía.
Pero la filosofía coworking no consiste solo en alquilar una «oficina barata» al compartir los gastos, los precios son un punto a favor sí, pero hay mucho más.
Los seres humanos somos seres sociales, y nuestro estado de ánimo influye muchísimo en nuestra productividad laboral. Pasar horas solo en una oficina o en casa no es cómodo para la mayoría de las personas, al menos a la larga.
Ya sea por las infinitas distracciones que tenemos en casa: niños, tareas del hogar… o todo lo contratio: silencio absoluto y soledad. Necesitamos y QUEREMOS relacionarnos, al menos para un café rápido.
¿Pasa algo si en mi trabajo tengo muchas llamadas? ¡CLARO QUE NO! Los espacios de coworking no son bibliotecas, con centros de trabajo, por lo que aceptar llamadas está a la orden del día. Además de las famosas videoconferencias con clientes, socios o compañeros de trabajo si estás teletrabajando para una empresa.
Si lo que necesitas es privacidad para una llamada, presentación o reunirte con alguien tanto presencial como telemáticamente, estos espacios suelen contar con salas de reunión para usos de sus coworkers, bien incluidas en las tarifas o de alquiler adicional.
Si nunca has trabajado en un espacio de este tipo, te animo totalmente a probarlo, pues te puede sorprender.